El psoas, también llamado “músculo del alma” es el músculo mas profundo y potente del cuerpo. Nace en las lumbares y atraviesa la cintura hasta el fémur.
Es el único músculo que une la columna con las piernas, lo que hace que sea, el gran estabilizador central del cuerpo siendo fundamental casi para cualquier movimiento de nuestro cuerpo (andar, mantenernos en pie, montar en bici, practicar cualquier tipo de yoga, etc).
¿Por qué el psoas se llama también “músculo del alma”?
El psoas, está conectado directamente con nuestro cerebro reptiliano (encargado de nuestra propia supervivencia enviando respuestas inmediatas a posibles alertas o amenazas); también está conectado con el diafragma (afecta a nuestra respiración) y responde ante el miedo reflejo haciendo que el psoas se contraiga.
A pesar de no tener consciencia del psoas, es uno de los músculos que más patologías puede llegar a crear (dolor en las lumbares, en las caderas, problemas en la postura, respiración superficial, debilidad del sistema inmune, dolor menstrual, fatiga, ciática… entre muchas otras) y por eso, es fundamental hacerse consciente de su existencia para evitar que nos bloquee tanto emocional como físicamente.
Te voy a explicar tres posturas específicas que te van a ayudar a estirar y trabajar el psoas.
Supta virasana
También conocida como la “postura del héroe reclinado”. Para realizar esta postura, colócate de rodillas, separadas a una distancia similar al ancho de tus caderas y desde ahí, inhala y alarga los brazos hacia el techo; cuando exhales, lleva tu espalda hacia el suelo y el glúteo a los talones. Los brazos puedes alargarlos hacía atrás o dejarlos por detrás de tu cuello (lo que te parezca más cómodo). También tienes la opción de apoyar en el suelo la parte superior de la cabeza o la parte alta de la espalda. Puedes ayudarte para llegar a esta postura con mantas o bloques colocados en la zona lumbar y si aún así, te sigue resultando difícil, puedes probar haciéndolo sólo con una pierna flexionada y desde ahí, tumbarte hacía atrás.
Anjaneyasana o high lunge
Conocida también como “postura de la luna creciente”. Para realizar esta postura nos colocamos apoyando la rodilla izquierda junto con el empeine en el suelo y la derecha flexionada por delante con el pie apoyado contra el suelo haciendo coincidir tu rodilla con tu talón en la misma línea. Desde esta posición, inhalamos, juntamos las palmas de las manos enfrentadas y crecemos hacía el techo, alargándote lo máximo posible hacía arriba y llevando el peso de tu cuerpo a la pierna adelantada. Aguantar en la posición de 20 a 30″ intentando arquear más la espalda durante cada respiración.
Lucia Liencres
THE CLASS YOGA
Más de 400 clases + Tu calendario de yoga adaptado a ti
Eka pada raja kapotasana
Eka significa uno, pada es pierna, raja es real o rey y kapota es paloma. Se llama así porque al realizarla sacamos pecho, como una paloma, como si quisiéramos echarnos hacia delante.
Para hacer la postura, lo que tienes que hacer es flexionar una pierna y colocarla delante y estirar la otra pierna hacia atrás, de forma que el empeine quede apoyado en el mat. Una vez aquí deberás colocar las manos a ambos lados del cuerpo, con la palma de la mano firmemente apoyada en el suelo y abrir bien el pecho, manteniendo aquí unas cinco respiraciones. A continuación haremos lo mismo con la pierna izquierda.
Si eres un yogui mas avanzado, te dejo este enlace en el que puedes ver como hacer la postura de la paloma o eka pada rajakapotasana completa.
Entre los beneficios del yoga podemos destacar algunos mentales y físicos, como los estiramientos que te acabo de comentar. Inclúyelos en tu rutina para sentirte mejor y evitar las agujetas en la medida de lo posible 😉
Lucia Liencres
THE CLASS YOGA
Más de 400 clases + Tu calendario de yoga adaptado a ti